Aspartato de arginina

Aspartato de Arginina o Arginina Aspartato es el nombre de un aminoácido capaz de mejorar el rendimiento de los tejidos musculares, la capacidad del sistema respiratorio, el funcionamiento del sistema cardiovascular e inclusive la estimulación del sistema nervioso. Para aprovechar estos y otros efectos, es requisito indispensable el manejo responsable de los tiempos y dosis de administración.

Generalmente, el deporte de mediano y alto rendimiento es el ámbito en el que más se utilizan los suplementos con aspartato de arginina, puesto que tanto aficionados como profesionales del culturismo lo incluyen dentro de su plan nutricional y como complemento a la ingesta habitual de proteínas. También funciona como excelente sustituto del óxido nítrico, ya que estimula su producción y evita el consumo directo de ese componente, frecuentemente asociado a descensos bruscos de presión arterial y agudos dolores de cabeza.

El aspartato de arginina es también una excelente opción para estimular el rendimiento en personas que atraviesan momentos de gran fatiga física, cansancio crónico o desnutrición proteica. Es especialmente utilizada como nutriente adicional en casos que se requiere la recuperación rápida de pacientes con anorexia.

Dentro de la naturaleza, la fuente más importante de arginina son los peces, crustáceos y mariscos. También se ha detectado la presencia de este aminoácido en la leche materna, por lo que se estima no representaría inconveniente alguno la ingesta de aspartato de arginina durante la lactancia. De todas maneras, como en todo caso especial, es necesario recurrir a la consulta médica de un profesional antes de ingerir ésta u otras sustancias similares.

El consumo de aspartato de arginina normalmente se realiza mediante vía oral (ampollas bebibles o comprimidos efervescentes), quedando las dosis condicionadas a las características del consumidor. Normalmente, un adulto consume de dos a cuatro dosis diarias de 1 gramo, prolongándose el tratamiento no más de un mes (salvo en casos especiales). Los niños mantienen las dosis diarias de 1 gramo, pero reduciendo la frecuencia a una o dos tomas diarias. Es recomendable ingerirlo antes o durante las comidas, acompañándolo con agua.

Algunos detalles importantes para quienes consumen aspartato de arginina: ante el olvido de tomar una dosis, ésta deberá obviarse y esperar hasta la próxima, ya que ingerir dosis muy cercanas entre sí podría provocar molestias de estomago importantes. Además, como sucede con otros suplementos, es fundamental tener en cuenta la existencia de problemas renales, las cuales se podrían intensificarse por el consumo de aspartato de arginina.

Beneficios de la Arginina

La arginina es un aminoácido esencial y descripto frecuentemente como uno de los más importantes nutracéuticos en la actualidad (productos elaborados a partir de alimentos pero que se comercializan en forma de píldoras, y otras presentaciones). Posee una gran cantidad de propiedades respaldadas por la comunidad científica desde hace muchos años, alimentando el interés de los especialistas por investigarla y descubrir sus múltiples aplicaciones.

Tras largos estudios específicos y experimentos de distintas clases, la arginina está plenamente aceptada como parte de diferentes terapias. La medicina moderna está comenzando a implementarla de manera extensiva en casos de envejecimiento prematuro, deficiencias genéticas, enfermedades por exceso de adiposidad, problemáticas masculinas de disfunciones sexuales y complicaciones cardiovasculares.

Entre los reconocidos beneficios de la arginina se cuenta la notable mejoría que produce en el sistemainmunológico , fundamentalmente debido al aumento de la producción de leucocitos. Las defensas se ven fortalecidas y el cuerpo humano resiste de manera mucho más firme la presencia de agentes externos perjudiciales.

Otro beneficio se relaciona con el tratamiento dela obesidad y la segregación anormal de hormona  de crecimiento humano (HCH). Generalmente, las personas con obesidad registran una alta presencia de insulina en la sangre y una liberación insuficiente de HCH. Mientras que la insulina tiende a estimular el almacenamiento de las grasas e hidratos de carbono, la HCH favorece el uso de estas grasas en forma de energía (lipólisis). Si la proporción entre una y otra se orienta excesivamente a favor de la insulina, la obesidad puede verse severamente agravada. El uso de la arginina es un método efectivo para generar un aumento de la HCH y revertir la proporción, equilibrando el funcionamiento orgánico.

Los sexólogos y especialistas en problemas de sexualidad aprecian los beneficios de la arginina en los tratamientos tendientes a mejorar la circulación sanguínea, ya que produce notables resultados en aquellos pacientes que reportan problemas para lograr y/o mantener una erección. La vasodilatación colabora en la irrigación del pene, facilitando su funcionalidad.

Para la preparación física, la arginina es un excelente suplemento cuya efectividad es inmejorable en la eliminación del amoníaco, uno de los residuos que se acumulan en los tejidos musculares tras la práctica de ejercicios físicos. Mediante la aceleración de este proceso, la resistencia aumenta y el cuerpo se reconstruye más adecuadamente. También es conocida en el ámbito de los culturistas como precursor de la creatina, principal nutriente en el proceso de fabricación de compuestos energéticos por parte del organismo.

Usos y dosis de la arginina

Arginina es el nombre de un aminoácido descubierto y aislado por vez primera en 1886. Durante muchos años se estudiaron sus características, hasta que en 1932, un grupo de investigadores logró relacionar sus funciones con el “ciclo de la urea”. En este proceso, la urea es generada por el cuerpo y se produce la eliminación de amoníaco, un residuo tóxico generado a partir del esfuerzo físico. Siete años más tarde, se descubrió también su importancia como precursor de creatina, el componente básico para la síntesis de compuestos altamente energéticos.

Algunos grupos científicos catalogan a la arginina como un aminoácido noesencial debido a que el organismo es capaz de sintetizarla, pero muchos otros han decidido revisar esta clasificación, ya que si bien es posible generarla en cantidades suficientes, no son pocos los casos en los que un paciente necesita una provisión externa para alcanzar un funcionamiento fisiológico adecuado. Esta situación se da en individuos que generan excesivo amoníaco, desnutrición proteica, diálisis peritoneal, anormalidades en la velocidad de crecimiento o incluso quemaduras e infecciones. Síntomas clásicos de la falta de arginina son los problemas de cicatrización, afecciones dérmicas, caída inusual de cabello y estreñimiento recurrente.

La arginina es un precursor del óxido nítrico, por lo que muchos deportistas hacen uso de ella para evitar la ingesta directa de dicho óxido, conocido por potenciales descensos en la presión arterial e intensos dolores de cabeza que conlleva su uso regular.

Habitualmente se utiliza arginina en la preparación física de deportistas, el tratamiento sobre pacientes con problemas de obesidad, casos de infertilidad y/o impotencia masculina, problemas en la cicatrización de heridas e inclusive la migraña.

No existen dosis pre-establecidas para el consumo de arginina, ya que su proporción depende en gran medida de las características que muestre el paciente pero cuando se trata de adultos (de 18 años de edad en adelante), las dosis recomendadas van de 1 a 3 gramos por vía oral, tres a cuatro veces por día, siendo también factible el uso de cremas aplicadas por vía tópica para acelerar la cicatrización. La aplicación intravenosa de este aminoácido debe ser estrictamente supervisada por un médico especialista.

En cuanto a los menores de 18 años, es poco recomendable el uso de arginina, fundamentalmente por la falta de documentación científica precisa sobre la interacción entre un organismo en pleno desarrollo y la ingesta de este aminoácido, así como las dosis adecuadas y potenciales efectos secundarios.

Propiedades de la arginina

La arginina es un aminoácido esencial descubierto por el químico suizo Ernst Schulze en el año 1886. Schulze fue el primero en aislarla a partir del extracto de semillas de lupino. Una vez publicado el descubrimiento y conocido su papel de precursora de la creatina, se le atribuyeron falsas propiedades relacionadas a la conversión de proteínas epidérmicas en tejido muscular, motivando el lanzamiento y la fabricación masiva de “milagrosas” cremas.

El paso del tiempo desmintió estos y otros supuestos beneficios, pero reveló su capacidad para estimular el desarrollo del sistema inmunológico, mejorando la producción de leucocitos y fortaleciendo las defensas del organismo.

La ingesta de suplementos con arginina contribuye notablemente a la reducción de los niveles de colesterol y favorece la circulación de sangre por sus propiedades vasodilatadoras. Muchos sexólogos y especialistas en sexualidad han comenzado a implementar suplementos de arginina entre los tratamientos para contrarrestar las disfunciones eréctiles. Además, se ha comprobado la capacidad de la arginina de aumentar el flujo promedio de esperma, mejorando el síntoma de esperma insuficiente, común en hombres con problemas de fertilidad.

Su participación en el “ciclo de la urea” acelera la eliminación del amoníaco alojado en los músculos tras el ejercicio, lo que aumenta la resistencia física y mejora los tiempos de recuperación. Esta propiedad le hace muy apreciada dentro del ámbito deportivo, donde los preparadores físicos suelen administrarla con el objetivo de potenciar determinadas secciones del entrenamiento durante períodos puntuales y bastante cortos.

Utilizando arginina es posible estimular la hormona de crecimiento (llamada también somatotropina o STH) y la generación de óxido nítrico. Muchos deportistas directamente han reemplazado el uso de dicho óxido por suplementos de arginina, ya que ésta es el elemento precursor y no conlleva las molestas contraindicaciones de consumir óxido nítrico puro.

Otra proteína que utiliza arginina para sintetizarse es el colágeno, responsable de dar firmeza a la piel y resistencia ante los agentes externos. Una gran variedad de cremas disponibles en el mercado utilizan arginina para sus fórmulas, estimulando mediante el uso tópico la producción de colágeno y el mejoramiento de la piel.

Finalmente, muchos culturistas han experimentado resultados similares a los que ofrece el consumo de carnitina, buscando mejorar el uso de grasas como energía combustible para los músculos y reduciendo así  los niveles de adiposidad localizada en el cuerpo.

Antioxidantes y la actividad deportiva

Se llama oxidación a la reacción química que se produce en nuestras células en el momento en que éstas consumen oxígeno. De dicha reacción surgen además unas moléculas llamadas “radicales libres” que ocasionan gran daño a las células circundantes y son responsables del envejecimiento prematuro y hasta se les atribuye la capacidad de detonar ciertas patologías como el cáncer, accidentes cardiovasculares o neurológicos.

Por consecuencia lógica, a mayor actividaddeportiva , mayor consumo de oxígeno por parte de las células y por ende mayor oxidación. ¿Los deportistas producen una mayor cantidad de radicales libres? Es posible, pero tal situación se equilibra con el elevado consumo que los atletas hacen de frutas y verduras, poderosos antioxidantes naturales.

Algunas organizaciones internacionales de la salud no coinciden en la necesidad de que un deportista necesite la ingesta extra de suplementos dietéticos que puedan aportar más vitaminas, minerales y antioxidantes a su organismo. De hecho, algunos expertos aconsejan que en caso de incorporar estas sustancias de manera exógena, su cantidad nunca debe superar los requerimientos diarios establecidos para una persona común.

Sin embargo, es habitual que los deportistas observen un mayor nivel de estrés oxidativo debido al esfuerzo muscular que realizan, el cual demanda altos niveles de oxígeno consumido a nivel celular, y que por lo tanto consideren necesario reforzar mediante suplementos de antioxidantes (como la vitamina C, E, A y minerales como el Selenio, Zinc, etc.) su dieta cotidiana.

Es preciso mencionar en este punto que aunque se trate de sustancias inocuas en apariencia, una sobredosificación podría generar algún nivel de toxicidad de diversa gravedad. En el caso del consumo excesivo de vitamina C, por ejemplo, promueve la formación de cálculos biliares o afecta el funcionamiento renal, mientras que un elevado aporte al organismo de vitamina A puede conducir a colestasis intrahepática o interacciones con otros medicamentos.

Lo más recomendable es que en los casos de deportistas aficionados o personas que se encuentran desarrollando programas de entrenamiento físico destinados a reducir el peso corporal o mantenerlo, eleven el consumo de antioxidantes mediante una mayor ingesta de productos naturales o con una suplementación con dosis moderadas.

Los deportistas de alto rendimiento o atletas de elite por su parte, pueden incrementar el consumo de antioxidantes, vitaminas y minerales, a través de la ingesta de suplementos dietéticos específicamente diseñados, pero siempre bajo la estricta supervisión de un profesional de la salud.